Italia ha aprobado una medida por la que se declara que la inmigración clandestina es un delito que se castigará con penas de cárcel.
El derechista Silvio Berlusconi, nuevo Jefe del Gobierno italiano desde hace dos semanas, aprobó el miércoles estas duras reformas, como había prometido a los ciudadanos durante su campaña electoral.
Este cambio supone la aceleración de las expulsiones de indocumentados y el aumento de las condenas en un tercio para los inmigrantes en situación ilegal que cometan delitos en este país europeo.
El Gobierno pretende, antes del mes de julio, haber aprobado una resolución que contemple penas desde seis meses hasta cuatro años de cárcel para quienes acudan al país de forma no legal.
La aprobación de esta nueva ley ha creado mucha polémica y cuenta con críticas por parte de la oposición de izquierda italiana, entre otros grupos. Para algunos es "exagerada", sin embargo, quienes la defienden se justifican señalando que, en otros países de la Unión Europea como Alemania, Francia y Reino Unido, también se considera delito, aunque las penas allí son más bajas: entre tres y doce meses de prisión.
Actualmente hay unos 700.000 extranjeros en situación irregular en Italia, de los cuales unos 400.000 prestan servicio como acompañantes de ancianos.
1 comentario:
Ya era ora d q alguien tomara cartas n l asunto y q exara a kien no tiene papels!!! Xq a ste paso nos superan, como ya acn si cntamos a los legals e ilegals.
Speremos t tomn ejemplo!!!
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